Limpieza y carga de cristales
¿Cómo limpiar y cargar energéticamente tus cristales?
Siempre que adquieras un cristal nuevo límpialo y cárgalo antes de empezar a trabajar con él. Ese cristal ha pasado por muchos lugares, por muchas manos y se recomienda hacer un "reset energético" cuando llega a ti. Sin entrar paranoia, por favor. No te va a caer ninguna maldición, ni te va a caer una maceta en la cabeza en el trayecto de la tienda hasta casa. Pero si es cierto, que todo lo que nos rodea genera interferencias constructivas o destructivas según su emisión de ondas de frecuencia, su vibración. Las constructivas potencian la calidad de las ondas que se encuentran y las destructivas la anulan. Es decir, si tú estás trabajando en elevar tu vibración, meditando, haciendo yoga, trabajando la gratitud y el perdón o lo que sea que a ti de ayude, intenta ser consciente de tu entorno también. Todo lo que vibre en sintonía se potencia y en caso contrario, se neutraliza o se anula la frecuencia durante el encuentro.
Por eso también se limpian y cargan cuando los has usado para algún trabajo intenso o los ha tocado otra persona. Y es recomendable tener el hábito de hacerlo de vez en cuando, como una ITV de los cristales. Por lo general, esta limpieza se hace coincidir con la luna nueva o luna llena.
Existen varios métodos para limpiar y cargar tus cristales:
- Colocándolos sobre la tierra de una planta o en la naturaleza.
- Con agua corriente del grifo o en un río.
- Con la luz del sol o la luna (o ambas, para que tenga la energía yin de la luna y yang del sol)
- En un bol con agua con sal o de mar (esto no es recomendable hacerlo continuamente, solo el primer día, porque la sal puede ir gastando el cristal)
- Con incienso, salvia o palosanto, envolviendo de humo la piedra durante un rato.
- Con reiki.
Programar tus cristales:
Fases lunares y carga energética:
Luna nueva: Se asocia a una energía iniciadora, pero introspectiva, reflexiva. Ideal si vas a emprender un proyecto, planificar un viaje o estás empezando en una relación sentimental o laboral. Para nuevas etapas en general, pero en estado de gestación aún. Es cuando queremos ir sembrando la semilla en algo, cogiendo energía e ideas.
Luna llena: En esta fase la luna se encuentra iluminada completamente por el sol y su energía es expansiva y social. Es una buena oportunidad encontrar mayor claridad para la toma de decisiones o para concluir sabiamente cualquier aspecto en tu vida. Nos ayuda ser más resolutivos/as. Es buen momento también para recoger frutos, para lanzarnos a la acción, tras la etapa reflexiva de la luna nueva.
Pronto subiré otro artículo hablando con más detalle de las fases lunares y como nos influyen, especialmente a la mujer.